Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Por una igualdad real en el ámbito laboral. Día Internacional de la Mujer.

Con el objetivo de poner el foco en los avances y retos para alcanzar la igualdad real, desde Criteria hemos preparado este artículo poniendo el foco en los avances y retos actuales en el ámbito laboral.
Picture of Rocío Carmona
Rocío Carmona
Consultora de Igualdad

Día internacional de la mujer

Desde el año 1978, el 8 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Mujer a raíz del acuerdo adoptado en la Asamblea General de las Naciones Unidas para eliminar toda forma de discriminación hacia las mujeres y promover su empoderamiento y conseguir su plena participación en la sociedad.

Con el objetivo de poner el foco en los avances y retos para alcanzar la igualdad real, desde Criteria hemos preparado este artículo poniendo el foco en los avances y retos actuales en el ámbito laboral:

Avances y retos en materia de igualdad

ClosinGap es un indicador que permite analizar los avances hacia la paridad de género en 5 grandes categorías analíticas (empleo, salud, digitalización, educación y conciliación) compuestas por un total de 28 variables. La III edición del Índice ClosinGap 2023 indica una reducción de la brecha de género en 1,4 puntos porcentuales, pasando del 63,3% en 2021 al 64,7% en 2022.

Al ritmo del periodo 2015-22, se necesitarán 33 años para alcanzar la paridad.

Aunque se observa una mejora respecto al año anterior en los indicadores de empleo, educación, conciliación y digitalización; ha empeorado el de salud y bienestar.

Índice ClosinGap

2020

2021

2022

64,1

63,3

64,7

Empleo

65

66,1

67,2

Educación

67,9

67,9

71,1

Digitalización

71,3

71,4

75

Conciliación

44

40,8

41,4

Salud y bienestar

84,5

84,4

84

 

A continuación, se muestra un resumen de los avances y retos en cada categoría:

 

AVANCES

RETOS

Empleo

Incremento del indicador de liderazgo de empresas privadas y la brecha en las pensiones

El empleo precario ha disminuido en menor medida para las mujeres que para los hombres

Educación

La tasa de abandono escolar, de educación terciaria y la formación continua de personas adultas han alcanzado y superado la paridad

La educación de carreras técnicas sigue teniendo una brecha mayor al 50% aunque haya experimentado una mejora respecto a los años anteriores

Digitalización

Se alcanza la paridad en las compras por internet y mejoran las habilidades informáticas y la ratio entre hombres y mujeres en profesiones digitales.

La ratio entre hombres y mujeres profesionales en el ámbito digital mejora, aunque queda más del 60% de brecha por cerrar.

Conciliación

Aumenta 0,6 puntos porcentuales respecto a 2021.

Las brechas son más elevadas que en la prepandemia. La parcialidad por razones de conciliación aumentó debido al COVID-19 y no se ha conseguido recuperar. Además, el tiempo dedicado al ocio se reduce en mayor medida para las mujeres,

Salud y bienestar

Indicador con mayor paridad de los analizados

El indicador ha empeorado para las mujeres debido al aumento de riesgo de pobreza o exclusión y al retroceso de la variable de años de buena salud respecto a la esperanza de vida

 

Desde ClosinGap se analiza el impacto en el PIB de la menor tasa de empleo y actividad de las mujeres en el mercado laboral, el menor número de horas trabajadas debido a su mayor presencia en puestos a jornada parcial y la mayor presencia de mujeres en sectores con una menor productividad.

“Como consecuencia de estas brechas, mientras que las mujeres en España representaron el 51,4% de la población en edad de trabajar en 2021, tan solo contribuyen a un 42,1% del PIB español (+1,8% vs 2020)”

Impulsar el talento femenino y cerrar las brechas de género en el mercado laboral es clave no sólo para la recuperación económica, sino que también tendría un gran impacto positivo en la salud y el bienestar de nuestra sociedad.

 

Los cuidados y la conciliación como reto principal en el avance hacia la igualdad

Más allá de los resultados del informe de ClosinGap, los últimos informes elaborados analizando la evolución y las causas de la brecha salarial, apuntan al desigual reparto de las tareas domésticas y de cuidados y a la infravaloración de los trabajos feminizados como obstáculo fundamental para alcanzar la igualdad salarial y en el ámbito laboral.

Como ya apuntaba mi compañera Cristina López García Vaquero en el artículo por el Dia de la Igualdad Salarial, la infravaloración que históricamente ha afectado a los trabajos feminizados repercute directamente en la retribución. Así, debido a la influencia de la división sexual del trabajo, las mujeres se concentran en sectores cuyo reconocimiento económico y social es inferior al de sectores masculinizados. Asimismo, el desigual reparto de las tareas domésticas y de cuidado y la aún escasa conciliación y corresponsabilidad fomenta la feminización de las jornadas parciales, los contratos temporales, las reducciones de jornada y el uso de permisos y excedencias por motivos de cuidado.

Tal y como reflejaba el Boletín de la Igualdad en el Empleo (BIE) dedicado a la Desigualdad retributiva entre mujeres y hombres elaborado por el Instituto de las Mujeres:

  • Las oportunidades que tienen las mujeres para progresar en sus trabajos y recibir un mayor salario se ven afectadas por sus responsabilidades familiares.
  • Las mujeres trabajan menos horas y con contratos a tiempo parcial para poder compatibilizar su vida laboral, personal y familiar.
  • Las mujeres tienen más interrupciones de sus carreras profesionales para hacerse cargo del cuidado de menores y dependientes.
  • La brecha retributiva se incrementa cuando las mujeres tienen hijos e hijas y cuando trabajan a tiempo parcial.
  • La falta de corresponsabilidad por parte de los hombres por lo que respecta a las tareas domésticas o al cuidado de personas dependientes, incide en la existencia de brecha salarial de género.
  • Resulta fundamental una mayor corresponsabilidad entre mujeres y hombres en las tareas domésticas y de cuidado, así como un mayor uso de las medidas y permisos de conciliación por parte de los hombres.

 

La conciliación y corresponsabilidad son pues, aspectos clave para la progresión profesional y económica de las mujeres y frenar el empeoramiento de la salud y el bienestar de las mujeres.

Si partimos de que todas las personas somos interdependientes y necesitamos de cuidado a lo largo de nuestra vida, los trabajos de cuidado deberían entenderse como esenciales para el bienestar de la sociedad.

Aunque se ha producido un avance significativo en materia de conciliación en el ámbito laboral, estas medidas se han orientado principalmente a posibilitar las tareas y responsabilidades de cuidado de las hijas e hijos a cargo, dejando en segundo plano los cuidados a personas dependientes o mayores, que en la mayoría de los casos son asumidos por las mujeres.

En este sentido, los agentes sociales, incluidas las empresas, deben ampliar su mirada con respecto a las medidas de conciliación, teniendo en cuenta no sólo el cuidado de menores e incluir medidas dirigidas a fomentar la corresponsabilidad para evitar que los cuidados sigan recayendo en mayor medida en las mujeres penalizándolas en el empleo.

Un reparto igualitario de los cuidados fomentaría no sólo la reducción de la brecha en el ámbito laboral sino también la detectada en materia de salud y bienestar, ya que reduciría la sobrecarga de las mujeres y los problemas de salud mental relacionados con ella.

Siendo la igualdad entre mujeres y hombres un compromiso y responsabilidad compartida, es necesario que todos los agentes sociales se impliquen en poner los cuidados en el centro y diseñar las políticas y medidas necesarias para evitar que algo esencial para la sociedad como los cuidados deje de ser un obstáculo para el desarrollo personal y profesional de las mujeres y consecuentemente, para lograr la igualdad real.

En este sentido, los resultados de un estudio realizado por el Observatorio Social de la fundación ”La Caixa” señalaban que la implantación de prácticas laborales más flexibles como el teletrabajo y la compactación de la jornada laboral podría favorecer la igualdad de género dentro y fuera del hogar y fomentar una mayor dedicación de los hombres a las tareas y cuidados domésticos ampliando la corresponsabilidad.

Asimismo, para corregir la infravaloración de las profesiones feminizadas, los últimos avances normativos han desarrollado herramientas esenciales como la Valoración de Puestos de Trabajo con perspectiva de género y los registros retributivos s, siendo necesario apostar por su correcta implementación.

Desde Criteria, reiteramos nuestro compromiso y disposición para impulsar, apoyar y acompañar a empresas corresponsables en el diseño e implantación de medidas dirigidas a reducir los obstáculos señalados en el presente artículo.

Establezcamos alianzas para avanzar más rápidamente hacia el compromiso común de avanzar hacia la igualdad real.

 

 

 

Te ayudamos

Déjanos tu consulta y contactaremos contigo lo antes posible.

¿Quieres saber más?

¿Te gustaría recibir más información sobre todas las novedades del sector de los recursos humanos? ¡Suscríbete a nuestra newsletter!